La fórmula del saldo restante se utiliza para encontrar el saldo restante de un préstamo en un momento dado. Por ejemplo, para determinar el saldo final restante de un préstamo, se puede utilizar esta fórmula específica. Esta fórmula se puede usar en el presente o para calcular el valor en una fecha futura. Encontrar el saldo restante de un préstamo solo se puede usar con préstamos amortizados. Los préstamos amortizados son un tipo específico de préstamo exclusivo de otros tipos. Si el interés y el principal aplicados al préstamo están predeterminados, se puede utilizar la fórmula del saldo restante.
La fórmula del equilibrio restante
FV = PV (1 + r) ^ n – P ((1 + r) ^ n -1 / r), donde FV es el valor futuro o el saldo restante, el valor presente PV o el saldo original, el pago P, la tasa r y n cantidad de pagos.
A menudo, el “valor futuro” puede ser un concepto difícil de entender en términos de la fórmula y el saldo restante. El saldo después de los pagos se conoce como el valor futuro. El valor futuro es un valor que se estima que es exacto una vez que se han realizado los pagos. Este es un paso importante para lograr un plazo de préstamo exitoso. La tasa de interés y el plazo deben relacionarse entre sí para garantizar que el préstamo se reembolse de manera consistente durante todo el plazo. Este es el mismo principio que la mayoría de las fórmulas financieras, ya que permite una estructura y precisión.
También es importante asegurarse de que las tarifas mensuales se calculen mensualmente, en comparación con una base anual. Esto es importante ya que permite pagos mensuales precisos. El saldo restante de un préstamo se muestra para préstamos convencionales. Esto significa que cuando el monto del pago, la tasa y el plazo son fijos, este tipo de fórmula funciona mejor. Los préstamos convencionales son diferentes en compasión por otros tipos de préstamos. Algunas de las cualidades de un préstamo especializado son una opción, un pago gradual y una amortización negativa. Estos términos requerirán cálculos especiales que difieren del préstamo convencional general.
Algunos de los usos más comunes para la fórmula del saldo restante son préstamos de consumo, hipotecas y préstamos comerciales. Los préstamos de consumo, las hipotecas y los préstamos comerciales se benefician de la fórmula para encontrar el saldo exacto que queda en el plazo del préstamo. La cantidad de fondos gastados no tiene efecto en el cálculo del saldo restante. Este es un factor importante para comprender, ya que ayuda a que el préstamo se reembolse de acuerdo con los términos específicos establecidos.
Resolver la ecuación para la fórmula del saldo restante requiere dos secciones. La primera sección es el FV del original. La segunda sección es el FV de la anualidad. La variable sería “N” cuando no se realizó ningún pago. La segunda sección de la fórmula general sería el valor futuro. El valor futuro de los pagos se calcula hasta la variable “N”. El último paso es restar el VF del pago realizado del VF del saldo de pago original. Esta ecuación se puede usar simplemente para determinar el saldo restante general. Los usos más comunes de esta fórmula son las hipotecas, que permiten calcular el saldo restante para pagar el préstamo en su totalidad de acuerdo con los términos específicos acordados.