¿Qué se entiende en realidad por el término tasa de seguimiento?
El término comisión de seguimiento se refiere en realidad a una comisión recurrente que una empresa de capital privado puede cobrar con la intención de aumentar sus ingresos globales.
Por el término Tasa de Monitoreo, en realidad nos referimos a cualquier tasa que se cobra a un inversor por cualquier negocio de capital privado para el servicio de asesoramiento que se les está proporcionando. Puede ser de 2 tipos. El primer tipo es que puede ser una suma fija cada año y en segundo lugar, también se puede calcular como un porcentaje de los beneficios o ingresos. Cuando se trata de porcentajes, hay una suma mínima en la mayoría de las ocasiones que tienen que ser pagados por un cliente, independientemente de si se trata de ingresos o un beneficio. En la actualidad, se encontrará con una serie de empresas de capital social por ahí que hacen una especie de contrato con sus clientes con la intención de cobrar la cuota de seguimiento cada año y esto continuará durante un número específico de años, el número puede ser 10 o 20, por ejemplo. De hecho, tanto los particulares como los clientes institucionales de la empresa de capital privado están obligados a pagar esta comisión a largo plazo. Por un lado, se puede cobrar a cualquier inversor con el fin de manejar y supervisar su inversión. Por otra parte, en el caso de las empresas, esta comisión de supervisión se cobrará cada vez que una empresa de inversión participe en una adquisición o en cualquier otra actividad basada en acuerdos. Otra cosa que debe mencionarse aquí es el hecho de que no hay ningún límite fijo sobre exactamente cuánto se puede cobrar por una empresa de capital de sus clientes a pesar del hecho de que esto va a variar en gran medida de 1 por ciento a tanto como 3 por ciento.
Por otra parte, la empresa va a cobrar la tasa de seguimiento que dependerá de la MSA (que es la forma abreviada de Contrato de Servicios de Gestión) que se ha celebrado por la empresa, así como sus clientes. Este acuerdo en particular será válido hasta por 10 o 20 años y esto va a depender de los términos y condiciones que han sido acordados por ambas partes. La mayoría de los MSAs también vienen con una disposición particular que se conoce como pago estimado en virtud del cual es imperativo que los clientes paguen las tasas de supervisión durante todo el período de tiempo acordado, aunque la empresa de capital privado se vende o en caso de que las tenencias del cliente se venden antes de que finalice el plazo.
Por último, es posible que las tasas de seguimiento se sitúen entre el 3% y el 5% del EBITDA.